martes, 15 de noviembre de 2011

El milagro de la adopción

Hace muchos años, Dios puso en mi corazón un gran sueño, el poder darle amor y protección a un niño abandonado, creo que los  niños son el reflejo de como se encuentra la humanidad y el mundo, no sé si a todos les pasa pero cuando veo los ojos de un niño, siento que puedo ingresar hasta su alma, son tan transparentes y por lo general muy inocentes que en su mirada puedo ver su interior.

Jamás voy a olvidar que un trece de diciembre de hace casi nueve años, Dios me adoptó, me hizo su hija, me salvó, me perdonó y me liberó de todos mis pecados, Él no se olvido de mi, nunca me ha abandonado y es por su ejemplo que realmente entendí lo que significa el milagro de la adopción.

No los abandonaré como a huérfanos; vendré a ustedes. Jn 14:18

Dios nos ha permitido a muchas mujeres dar vida pero lamentablemente por diversas razones estos niños terminan en orfanatos, sin un hogar, sin amor y sin vida. 

La religión pura y verdadera a los ojos de Dios Padre consiste en ocuparse de los huérfanos y de las viudas en sus aflicciones, y no dejar que el mundo te corrompa. Stgo 1:27 


Estoy convencida que muchas personas podemos hacer algo al respecto, en nuestro país el índice de niños abandonados es alarmante, y creo que si Dios nos ha bendecido y tenemos la posibilidad de brindarle un hogar y una familia a un niño, deberíamos dejar a un lado nuestros prejuicios y extender el milagro de la adopción que hemos recibido. 

En la actualidad hay un movimiento que esta buscando sensibilizar a la iglesia de Cristo para que tomemos acciones por los más necesitados, si deseas participar e involucrarte puedes ingresar a esta web www.religionpura.com.

Hoy que lees este artículo, recuerda que tú puedes ser parte del milagro de la adopción.




1 comentario:

Anónimo dijo...

Si...es muy cierto...conozco personas q no pueden tener hijos, y tantas mujeres q no sólo los abandonan sino q abortan...como si dar vida o quitarla fuera un derecho con el q se puede jugar como "niños"...cuando en realidad es una responsabilidad... Sería Genial q pudiéramos como Cuerpo de Cristo hacer la Diferencia!!! =D Nadia